Un violento temporal azotó este miércoles Ordóñez y provocó voladuras de techos y graves daños en esa localidad cordobesa del departamento Unión.
Daños
El intendente Pablo Ladrón de Guevara contó que «en 20 minutos hizo un desastre» en esa población y que el viento se llevó por lo menos cuatro tinglados, techos de viviendas y plantas».
«Nosotros creemos que hubo una cola de tornado. Estamos recorriendo de a poco el pueblo para ver los daños y evaluar. Ya también estuve con la gente del Gobierno de Córdoba para hacer un relevamiento y para que nos puedan ayudar con nuestros vecinos», agregó en declaraciones a Cadena 3.
Además indicó que cayeron unos 60 milímetros aunque el viento fue «fuertísimo». «Hemos pasado sobre la ruta. Se ha llevado cuatro tinglados de firmas diferentes, pero también en los barrios periféricos la mayor falta en las viviendas. Son todas con techo de chapa», precisó.
«Tuvimos que llamar a los chicos para que evacuen el secundario y la escuela primaria. Ha arrancado hasta postes de cemento de raíz«, explicó Ladrón de Guevara.
«Es terrible ver la entrada de Ordóñez con los eucaliptos en el suelo. Nos causa un dolor terrible», enfatizó.
Sin evacuados
«Personas evacuadas no tenemos. Fue un temporal de 20 minutos. Pero sí tenemos todos los techos caídos y la cantidad de cables que hay en el suelo. Gracias a Dios que se cortó la luz porque arrancó muchísimos postes de cemento«.
También expresó que no cree que «se pueda restaurar hoy» el servicio de energía eléctrica en la población ubicada a unos 260 kilómetros al sudeste de la ciudad de Córdoba.
Otras localidades
«Me llamó el intendente de Justiniano Posse ofreciéndose para colaborar. A ellos gracias a Dios no les pasó nada. En Idiazábal sé que llovió 93 (milímetros), pero no pasó el viento que pasó por acá», dijo en otra parte del diálogo con la emisora cordobesa.
Al ser consultado sobre si los efectos del vendaval, Ladrón de Guevara respondió: «Ni en las inundaciones que hubo, nunca pasamos por semejante temporal como este, con chapas colgadas en los cables».
«Ha tumbado todo literalmente, no ha quedado nada en pie«, concluyó el intendente de Ordóñez.